jueves, agosto 24, 2006


Mientras Vivo...

Mientras más vivo, más aprendo.
Mientras más convivo en este deshumanizado mundo de humanos, más quiero a mi perro, que sólo sabe de afecto y lealtad.

Comprendo que la iracionalidad pareciera estar a la orden del día.
Que el procurarnos un sustento, que ha de ser una premisa válida de vida, a veces constituye para muchos, "patente de corso" que más de uno utiliza para atropellar al prójimo, en desmedido abuso del poder que detentan.

No importa la necesidad ni humanidad del otro, la de quien humilla y maltrata es más fuerte, es la que cuenta, por encima de la dignidad, el orgullo y compañerismo que en teoria debería existir, sobre todo cuando se comparte la mayor parte del tiempo, sobreviviendo a las presiones, falsas exigencias y derroches de "personalidad" de quienes bajo un aparente manto de altruismo y capacidad no pueden ocultar sus bajezas, egoismos e instinto discriminador (y depredador).
Acaso darwinismo social? ¿canibalismo laboral?moving?,¿cómo llamarlo y qué hacer?

Soy de la vieja escuela, lo confieso. A estas alturas del juego, no quiero ni pretendo cambiar. Vengo de otro mundo,de un universo remoto, millones de años luz, anteriores a esta mal llamada nueva "República", que saca a relucir lo peor de nuestra esencia.

Me enseñaron a creer en la gente, en la capacitación, la colaboración, solidaridad y el esfuerzo. Me enseñaron a ser "compañero y amigo" y por propia convicción, afortunadamente nunca me presté para perjudicar a mis compañeros, llevar chismes o fungir de informante con mis superiores, premisas de vida ahora vetustas de este presente apocalíptico, antesala de un futuro incierto, donde parecieran no tener cabida, porque la avaricia y el desmedido afán de posicionarse por encima del otro es superior a cualquier humana consideración.

Sin ir muy lejos, allí dentro de mi entorno, he podido presenciar situaciones escabrosas, desmoralizantes.
Arribismo, servilismo, discriminaciones, violación a la confidencialidad que debe surgir del afecto y más allá de éste, de la necesaria solidaridad que surge de los afines, de los oprimidos, maltratados y humillados, quienes encontrándose ante una misma realidad, lejos de dividirse se solidarizan, para hacerse un bloque y mantenerse unidos para subsistir.
Pero no, aqui si me maltratan,me gusta.
Y si lo hacen con mi compañero, mejor. Que lo aniquilen, para darme el gusto y placer de disfrutarlo, ésa parece ser la máxima. Para validar y acrecentar ese "masoquismo intelectual, laboral y funcionarial", para congraciarme con el superior jerárquico, le llevo los chismes, me convierto en instrumento de su afán por conocer lo que no debe y custodiar subrepticiamente la intimidad necesaria de mis afines, creyéndome más fuerte, sin entender que me humillo y minimizo ante los deseos malsanos de quien, en franco abuso de poder, intimida y vulnera mi dignidad personal y funcionarial, usándome con mi total consentimiento, para fines desleales que van más allá de la necesaria subordinación y vulneran,lesionan y mancillan la integridad.
Que bajeza tan vil y absurda, porque esas personas que hoy creen estarse atesorando una posición privilegiada con sus superiores, esas que creen estársela "comiendo", garantizándose el puesto o la estabilidad, fuera de las premisas reales y efectivas de su desempeño, bajo la débil,crasa y estúpida justificación de necesitar el puesto, mañana, tarde o temprano, también lo perderán todo, incluso la confianza y el respeto del cual una vez se hicieron acreedores antes de "defecar" sobre la integridad de sus compañeros de trabajo.
Determinar "quiénes son" no tiene sentido ni razón, ellos lo saben. Allá ellos con su conciencia y voluntad. El tiempo, que se encarga de todo, acometerá en su momento, obligándolos a reconocer aunque sea ante ellos mismos, tan triste realidad, quizás cuando ya nada pueda hacerse y la soledad carcoma sus almas.

Porque el modus operandi de ese superior, que en ejercicio de su mefistotélica manipulación mueve sus hilos y toca la música que les hace bailar a su gusto, manipulando y haciéndoles creer que confía en ellos, es precisamente ese, engañar para obtener información y en ejercicio de ese momentáneo y sucedaneo exceso de poder, creerse seguro, para mover sus piezas, pero al obtener la información y ejecutar su jugada, pierde el interés y así como arremete contra los inocentes, cuya información hoy obtiene, mañana los atacará a ellos, a sus informantes, más tarde que temprano enfilará baterias contra éstos, de quienes también habla mal, porque la estrechez mental y ausencia de capacidad, queridos amigos, aunque no lo crean, lamentablemente no tiene remedio y la vida, así como al decir de la mamá de Forrest, es como una caja de bombones, porque no sabés qué te va a tocar, también, dicen por ahí, "es como un bumerang", que todo lo devuelve, y ¡quien a hierro mata, es imposible que pretenda morir a sombrerazos!

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Aunque este artículo tiene un contenido duro, otros dirian "acido", describes con certeza, la realidad de muchos ambientes laborales, sobretodo en el que tu y yo tuvimos la oportunidad de compartir, largas horas... Hoy por hoy me alejo de todas esas sombras y malas "Vibras", pero con sentimiento profundo por dejar un gran amigo, que no calla ante la Injusticias, y no se vale del dolor ajeno para alcanzar su propósito... Ese eres tu... Te admiro por tan tenaz personalidad! Gracias por tantas cosas que me enseñastes!!!

FEVC dijo...

Agradecido estoy, como simple mortal,de haber tenido la oportunidad de compartir tantas vivencias y en ellas haber conocido gente de verdad, con alma,corazón y vida, que antepone lo que es ante la mediocridad y el arribismo,sin sacrificar nunca lo que son ni transformar su esencia, "gente" como tú que me ha permitido crecer y entender, que a pesar de todo,no he errado el camino ni estamos solos y al final día, siempre podremos,por encima de todas estas circunstancias, dormir tranquilos...gracias a ti princesa, un beso y ¡toda la suerte del mundo...guapa!

Anónimo dijo...

Ciertamente, mientras más vivimos, más aprendemos. La vida comienza a dar un giro diferente para mí y el procurarse un sustento ha de ser una premisa más importante aún. Vaya si que será diferente, pero no imposible, no señor. Seguir adelante es el deber ser. Saludos. MIGUELINA 22/05/07