Puente sobre aguas turbulentas...

Cuando las fuerzas parecen desvanecerse y pretendemos abandonar la lucha; cuando creemos que todo está perdido y optamos por abandonarnos, rendirnos, o simplemente tomar la sálida más fácil, huir, dar la espalda; o quizás pretender acabar con todo y dar al traste no sólo con nuestra misión de vida, sino además truncar todas las infinitas posibilidades de ser felices; en ese preciso momento,es cuando debemos darnos cuenta, que somos un instrumento de una fuerza superior, y existen situaciones que sencillamente escapan de nuestro control y alcance, por lo que hay que tomar una bocanada de aire fresco, respirar profundo y tratar de equilibrar nuestro sentir, dejar pasar, para seguir adelante, confiados en que esa fuerza superior, llámese Dios, Jehová, Yavé, Budda, está con nosotros y forma parte de ese maravilloso universo del que somos integrantes como poderosas micropartículas que ensamblan un todo, piezas de un hermoso rompecabezas sin cuya presencia seria imposible validar la imagen certera de la creación natural y divina...

Estamos aquí con un propósito, una misión, SER FELICES; y para ello, no hay fórmulas ni secreto alguno mas allá de ser uno mismo, con sus fortalezas y debilidades, virtudes y defectos, aciertos y desaciertos.

Equivocarnos, errar en la elección, no requiere de nuestra desaprobación y desafecto;no, ello forma parte de esta Vida útil que se nos ha concedido para luchar, buscar,encontrar y si erramos alguna vez,m aprender de ello, desechar lo inútil extrayendo la lección y seguir buscando, luchando...

Las lágrimas son necesarias, para validar nuestra fragilidad humana, forman parte de nuestra mortal esencia y no nos bpermiten olvidar qué somos y hacia adónde debemos apuntar en el sendero transitado, en el que efectivamente el sol siempre sale para todos...y la luna también, aunque incluso a veces, no nos percatemos de su existencia a nuestro alrededor...

No pretendo erigirme en censor o catalizador de fuerzas personales extrañas, ajenas a mi ser; no, tampoco quiero inmiscuirme abruptamente en vuestras vidas,pensamientos o deseos; No.

Lo que expreso, lo hago pensando en mis interioridades, en las miles de batallas transitadas,unas perdidas,otras ganadas, pero todas aprovechadas; en las veces que he tocado fondo y creido haber llegado al límite, con ganas de lanzarme al vacío, pero, sin afortunadamente haberlo hecho, por haber tenido la oportunidad de validar , a tiempo, cuanto vivo, he vivido y debo seguir viviendo. Quizás mi experiencia sea familiar para otro, quizás mi lucha, también sea la de otro; mis penas y fracasos, parecidos a las de otros. Y esa experiencia, lucha,penas y fracasos, han sido reconfortados con triunfos, alegrías y satisfacciones, he podido salir adelante, arrastrando la cobija, pero VIVO y consciente de que siempre existe un mundo de posibilidades,más allá de mis narices,con las que puedo estar de acuerdo o desacuerdo,pero que existen,estan alli;y definitivamente no soy yo el competente o facultado para interrumpir abruptamente mi libre tránsito por este camino de losas amarillas, sin haber llegado antes a mi destino.

Es tanto lo que podemos aprender y son tantas las pistas que en el camino vamos a encontrar, que debemos estar atentos para tratar de reconocer, de entre ellas, las que efectivamentae han de conducirnos al camino deseado...y si tomamos un atajo o por algún viejo recodo torcemos ese destino, es importante darnos cuenta y retomar la senda, sin perder los ánimos ni dejarnos llevar por el desaliuento o la desesperanza...

Todos somos heróes todos de nuestra propia , mágica, divertida y emocionante aventura, en la que somos protagonistas de nuestro destino, de ahi el por qué vivirla de ese modo, convencidos de que tras altos y bajos, lograremos vencer obstáculos y sobrellevar las situaciones hasta llegar a nuestro satisfactorio desenlace, no el impuesto abruptamente por una apreciación propia, sino el producto de esa decisión superior a nuestra mortal esencia...