lunes, octubre 09, 2006

La infidelidad...¿un mal necesario?




La Infidelidad (del latín in, negación, y fidelitas, fidelidad) es el incumplimiento del compromiso de fidelidad. En su acepción más común, la fidelidad es el compromiso de mantener relaciones sexuales sólo con la persona que es nuestra pareja. El concepto de pareja puede variar según nuestras concepciones, pero puede ser hombre con mujer, hombre con hombre y mujer con mujer. Por tanto, la infidelidad es quebrar ese pacto tácito de mantener relaciones sexuales con la persona qúe hemos escogido libremente como pareja.
Sin embargo, la infidelidad puede significar la rotura de cualquier compromiso que hayamos tomado libremente y, que por cualquier circunstancia hayamos querido quebrantar, no obstante no significa lo mismo que adulterio.
Traigo a colación el tema de la infidelidad, para referirme,especificamente a su empleo en el cine. Ya el maestro francés Claude Chabrol nos había eclipsado con "La Mujer Infiel".
Más recientemente, Adrianne Lynne, esteta de los noventa y precursor de un cine norteamericano muy comercial, nos habría tratado el tema en "Atracción Fatal", con una descollante y espléndida Glenn Close quien en una monumental actuación, martiriza hasta los límites a Michael Douglas, sumiéndolo en una vorágine de desesperación y angustia y haciéndole tambalear su matrimonio con la politicamente correcta Anne Archer.
El mismo Director trataría el tema dos veces más, con "Una propuesta Indecente", donde acompasadamente un matrimonio decide sacrificar su estabilidad emocional a cambio de una jugosa recompensa producto del affaire de la esposa (Demi Moore) con un acadualado millonario (un bastante venido a menos, pero aún atractivo Robert Redford) y después con el mismo tema, más depurado, pero igual de intrigante, pero desde el punto de vista femenino, parafraseando al maestro francés identificado al inicio, con INFIDELIDAD, en la que una excelente Diane Lane, nominada al Oscar por su desempeño, comete el pecadillo, para desestabilizar a su marido, nada menos que Richard Gere, sumiéndolos en un drama acompasado de mucho suspenso, crimen y tensión. Todo ello bajo una tónica moralista de sanción-castigo atroz para quien suele cometer el "pecado" de quebrantar la confianza o amor del otro.
Pero más allá de esa concepción moralista, la infidelidad nos plantea la necesidad de definir en nuestro interior nuestra seguridad afectiva, nuestro estado emocional, validar realmente cuán felices somos y honestos con nosotros mismos en nuestra realidad afectiva.
Hoy día, en este mundo globalizado, algunas parejas (heterosexuales,homoserxuales y bisexuales) expresan que la fidelidad no es más que una quimera, una utopía.
Para otros, tener o vivir un "affaire" o desliz con alguien distinto a tu pareja, no debe ser tratado con trascendencia, por considerar normal y carnal que alguien desee a otro, dado que "se peca hasta con el pensamiento y por ende la fidelidad no existe", por lo cual, en tanto la otra persona no se entere o esta situación no ponga en peligro la "estabilidad dual" establecida, no hay por qué generar conflictos.
Algunos otros, chapados a la antigua quizás, consideran una falta intolerable e imperdonable, ser infiel a su pareja y de ocurrir piensan que se transgrede el equilibrio preestablecido y se genera una ruptura con pérdida irreparable de la confianza y fin de la relación.
Bueno, la intención no es polemizar. De hecho traigo a relucir este tema con ocasión de haber disfrutado el día de ayer, a destiempo, la hasta ahora pénúltima producción fílmica del genial Woody Allen (Annie Hall, El Dormilón,Manhattan, Hanah y sus Hermanas, Crímenes y Pecados, Sombras y Niebla, La Rosa Púrpura del Cairo, Misterioso Asesinato en Manhattan, entre otras), "La Provocación" (Match Point).
Una película de excelente factura, redonda, madura e inteligente, muy al estilo del mago del suspense Alfred Hitchcock, más que de la neurosdis delirante y sarcástica acostumbrada por este inteligentisimo y talentoso newyorkino, quien esta vez se traslada al Reino Unido para brindarnmos una historia de ambiciones, inseguridades,romances,infidelidad y...bueno, tienen que verla,porque de verdad, la dirección,actuaciones y banda sonora de este film es de pronóstico reservado.
Su realización denota la madurez de un hombre de oficio y en ella todo está en su lugar...absolutamente todo!.
Verdaderamente Recomendable sin reservas.No se la pierdan y si ya la han visto o cuando lo hagán, coméntenla, por favor. He aqui su ficha técnica. Dirección y guión: Woody Allen. País: Reino Unido. Año: 2005. Duración: 123 min. Género: Drama. Interpretes: Jonathan Rhys Meyers (Chris Wilton), Matthew Goode (Tom Hewett), Emily Mortimer (Chloe Hewett Wilton), Scarlett Johansson (Nola Rice), Brian Cox (Alec Hewett), Penelope Wilton (Eleanor Hewett), James Nesbitt (Detective Banner), Alexander Armstrong (Sr. Townsend), John Fortune (John), Ewen Bremner (Inspector Dowd). Producción: Letty Aronson, Gareth Wiley y Lucy Darwin. Fotografía: Remi Adefarasin. Montaje: Alisa Lepselter.Diseño de producción: Jim Clay.Vestuario: Jill Taylor.

2 comentarios:

FEVC dijo...

Hace ya suficiente tiempo que les comenté sobre este excelente film, ¿todavía nadie lo ha visto?

Anónimo dijo...

Bueno, corazón, te comento que en efecto, no la he visto, pero este tema está de un profundo...que me encanta.
Alcancé a ver Atracción Fatal y Una propuesta indecente y ambas fueron tan bien llevadas que imposible no recordar su polémica temática.
Por lo visto, tendré que tener un cuaderno para anotar las pelis que tengo que ver en adelante. Hoy precisamente adquirimos una docena entre las cuales pude escoger "Paranoia", "Seduciendo a un extraño" , "Premonición" "Una abuela Virgen" entre otras. Gracias por todas las recomendaciones, créeme que las tomo en cuenta. Un abrazo 22/09/07 MIGUELINA