PLUMA POR PLUMA
Angel Ricardo Gómez
EL UNIVERSAL
domingo 3 de junio de 2012 12:00 AM
John Petrizelli. Cineasta
venezolano formado en la Universidad de Nueva York. Posteriormente
trabajó para la televisión europea en diversas regiones de África. Con
vasto conocimiento de la expresión cultural llanera, lugar donde sus
ancestros se dedican a la actividad agropecuaria, Petrizzelli pudo
penetrar íntimamente al universo de la música y las costumbres
tradicionales de la región central del país. De allí, documentales como
Carrao (1998), sobre "El Carrao de Palmarito", y Anselmo, la trampa de
la uña (2006) sobre el bandolista Anselmo López. Su interés por la
cultura popular ha salido a relucir también en documentales como María
Lionza: aliento de orquídeas (2007) y El rey del galerón (2008), sobre
Benito Quiroz. Actualmente produce otro documental sobre José Gregorio
Hernández.
El animalero. Así se le llama a Hiram Brito, quien suministró los loros, así como otras especies para la filmación. Brito trabajó en un zoológico y en un campamento, y cuenta con 25 años de trayectoria aportando animales para comerciales, eventos y películas. En el blog de la cinta, comenta: "Somos un equipo de tres personas... Mariela Silva es la encargada del mantenimiento de los animales. Trabajamos con cinco loros, dos vinieron de Amazonas y los otros tres loros son de Caracas".
Emilio Lovera. No es la primera vez que el humorista debe caracterizar voces. Para esta película se inspiró en el loro gris africano, también llamado "Yaco". "Este loro imita voces humanas en un tono grave", dijo Lovera, quien ya había imitado a un loro para un marca de bebidas alcohólicas y en los años 90 hizo la voz del loro en la serie infantil La pandilla de los 7. "Hay un protagonista eventual en cada época, pero este loro es el lazo que encadena todas estas épocas", asegura el cómico.
Presupuesto. La película tuvo el apoyo del Centro Nacional de Cine. Contó con un presupuesto de poco más de Bs. 3.000, aunque en 2010 buscó más apoyo financiero.
Rodaje. La filmación se llevó a cabo hace dos años, durante ocho semanas, en locaciones de selva, puerto y ciudad.
El ave. Se utilizaron cinco loros para el rodaje, que fueron rescatados del tráfico de esta especie y, según el director, fueron liberados al concluir la película.
Producción. Además de la óptica de 35 mm. se utilizó de 10 mm. para recrear la mirada del ave.
Posproducción. Para la película fue necesaria animación tridimensional -aunque no es una película en 3D.
El título. La primera dueña del loro es una vendedora de empanadas en Oriente, de ahí el título de la película, Er relajo der loro.
Los actores. Algunos de los humanos que trabajan en Er relajo der loro son: Alejo Felipe, Luis Gerónimo Abreu, Verónica Arellano (como Olga, esposa del personaje de Abreu), Gonzalo Cubero, Carolina Torres (en la foto), Vito Leonardo, Irabé Seguías (Leticia), Pedro Porras (Ramírez), Gonzalo J. Camacho, Aníbal Grunn, Aroldo Betancourt, Alejandro Daniel Meneses (niño warao que recoge al loro la primera vez) y la leyenda de la música venezolana Adilia Castillo, quien hace un cameo.
Los técnicos. Andrés Zawisza (director de arte y actor). Laura Goldberg (script). Patricia Ramírez (asistente de producción). Valeria Bolívar (segunda asistente de dirección). Mario Rodríguez (asistente de dirección).
Una pregunta. ¿Por qué hasta 1999? John Petrizzelli respondió: "Quise ver el pasado. El presente será juzgado, analizado o reflejado por otros cineastas... No trato de analizar el presente porque creo que está andando y es importante que la historia nos de chance para juzgarlo".
El animalero. Así se le llama a Hiram Brito, quien suministró los loros, así como otras especies para la filmación. Brito trabajó en un zoológico y en un campamento, y cuenta con 25 años de trayectoria aportando animales para comerciales, eventos y películas. En el blog de la cinta, comenta: "Somos un equipo de tres personas... Mariela Silva es la encargada del mantenimiento de los animales. Trabajamos con cinco loros, dos vinieron de Amazonas y los otros tres loros son de Caracas".
Emilio Lovera. No es la primera vez que el humorista debe caracterizar voces. Para esta película se inspiró en el loro gris africano, también llamado "Yaco". "Este loro imita voces humanas en un tono grave", dijo Lovera, quien ya había imitado a un loro para un marca de bebidas alcohólicas y en los años 90 hizo la voz del loro en la serie infantil La pandilla de los 7. "Hay un protagonista eventual en cada época, pero este loro es el lazo que encadena todas estas épocas", asegura el cómico.
Presupuesto. La película tuvo el apoyo del Centro Nacional de Cine. Contó con un presupuesto de poco más de Bs. 3.000, aunque en 2010 buscó más apoyo financiero.
Rodaje. La filmación se llevó a cabo hace dos años, durante ocho semanas, en locaciones de selva, puerto y ciudad.
El ave. Se utilizaron cinco loros para el rodaje, que fueron rescatados del tráfico de esta especie y, según el director, fueron liberados al concluir la película.
Producción. Además de la óptica de 35 mm. se utilizó de 10 mm. para recrear la mirada del ave.
Posproducción. Para la película fue necesaria animación tridimensional -aunque no es una película en 3D.
El título. La primera dueña del loro es una vendedora de empanadas en Oriente, de ahí el título de la película, Er relajo der loro.
Los actores. Algunos de los humanos que trabajan en Er relajo der loro son: Alejo Felipe, Luis Gerónimo Abreu, Verónica Arellano (como Olga, esposa del personaje de Abreu), Gonzalo Cubero, Carolina Torres (en la foto), Vito Leonardo, Irabé Seguías (Leticia), Pedro Porras (Ramírez), Gonzalo J. Camacho, Aníbal Grunn, Aroldo Betancourt, Alejandro Daniel Meneses (niño warao que recoge al loro la primera vez) y la leyenda de la música venezolana Adilia Castillo, quien hace un cameo.
Los técnicos. Andrés Zawisza (director de arte y actor). Laura Goldberg (script). Patricia Ramírez (asistente de producción). Valeria Bolívar (segunda asistente de dirección). Mario Rodríguez (asistente de dirección).
Una pregunta. ¿Por qué hasta 1999? John Petrizzelli respondió: "Quise ver el pasado. El presente será juzgado, analizado o reflejado por otros cineastas... No trato de analizar el presente porque creo que está andando y es importante que la historia nos de chance para juzgarlo".
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