martes, abril 22, 2008

Spielberg, Lucas y Ford juegan su sueldo al éxito de Indiana

Martes 22 de abril de 2008
Steven Spielberg, George Lucas y Harrison Ford han decidido renunciar a todas sus ganancias por la cuarta entrega de Indiana Jones si la taquilla no supera los 400 millones de dólares.
De esta manera, los ingresos iniciales por la venta de entradas para ver "Indiana Jones and the Kingdom of the Crystal Skull" ("Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal") irán a parar exclusivamente a las arcas de Paramount Pictures.

En esta época poco boyante para la industria de Hollywood, el elevado coste del film, unos 335 millones de dólares, llevó a los artífices del filme a acordar posponer sus ingresos, normalmente un porcentaje de la taquilla, hasta que la Paramount recupere su inversión en el proyecto.

Las grandes productoras son cada vez más prudentes a la hora de involucrarse en largometrajes multimillonarios ante las nubes negras que se ciernen sobre Hollywood, donde se palpa una crisis en el ambiente.

Cada vez es más caro hacer una película y ni las taquillas ni los DVD garantizan a los estudios amortizar la inversión, por lo que los amos de la industria buscan cubrirse las espaldas, especialmente después de una huelga de guionistas y un posible paro de los actores.

La Paramount, según fuentes del diario Los Ángeles Times, aportó 185 millones de dólares para la realización de la cuarta entrega de Indiana Jones y al menos 150 millones de dólares para su promoción en todo el mundo.

A estas cantidades se sumará el 2,5 por ciento de los ingresos que se obtengan de la distribución de la película, aunque Spielberg, Lucas y Ford no verán un centavo hasta que las nuevas aventuras del arqueólogo más famoso del cine reporten a los estudios 400 millones de dólares.

Las condiciones impuestas por la Paramount comienzan a ser algo habitual en Hollywood, donde hasta el momento las estrellas de la gran pantalla recibían pagos por adelantado y una parte importante de la recaudación en taquilla antes de que la productora recuperase su inversión.

Un ejemplo similar fue el acuerdo alcanzado entre Walt Disney, el productor Jerry Bruckheimer y el actor Johnny Depp para la saga de "Piratas del Caribe", o el firmado por esos mismos estudios, Bruckheimer y Nicolas Cage en "National Treasure: Book of Secrets" (2007), si bien todos ganaron dinero con los proyectos.

A priori, "Indiana Jones and the Kingdom of the Crystal Skull" es una apuesta segura y se espera que arrase en los cines cuando llegue a las carteleras el próximo 22 de mayo.

Las aventuras de "Indi" son de las más exitosas de la historia de Hollywood y la hasta ahora trilogía recaudó 1.200 millones de dólares en todo el mundo, 494 de ellos correspondieron a la caja lograda por la tercera parte de la saga "Indiana Jones and the Last Crusade" (1989).

Ese filme fue el primero en superar los 10 millones de entradas vendidas en un solo día, cuando se estrenó en los cines en la primavera de 1989, mientras que "Indiana Jones and the Temple of Doom" (1984) superó los ingresos obtenidos en su semana de lanzamiento por cintas como "Star Wars: Return of the Jedi" (1983).

La primera entrega, "Raiders of the Lost Ark" (1981), fue la segunda que más ganó, con 384 millones de dólares.

Estas cifras pueden parecer pequeñas si se comparan con los más de 1.800 millones de dólares obtenidos por "Titanic" (1997), la película más taquillera de todos los tiempos, aunque este filme salió al mercado una década después de la última parte de Indiana Jones, cuando el número de espectadores en el planeta era muy inferior.

El principal temor de los productores es precisamente los 19 años que pasaron desde la última cruzada de "Indi", casi dos décadas en las que se ha forjado una audiencia joven enganchada a las nuevas tecnologías a las que el látigo del arqueólogo les puede parecer una reliquia.

Lejos de los revolucionarios efectos especiales de hoy en día, Lucas y Spielberg apostaron por un rodaje a la antigua usanza para la cuarta entrega de Indiana Jones, que abandona la amenaza fascista y en su búsqueda de la calavera de cristal se verá las caras con los rusos en plena Guerra Fría. Cadena Global/EFE

1 comentario:

Anónimo dijo...

Yo aspiro y espero que arrase cuando llegue. Es mucha la espectativa que hay ante su llegada a las salas de cine. No pienso perdérmelo, a mí me enganchó desde la primera. Ojalá y no me equivoque en mi apreciación. De seguro será un éxito...además no pienso perderme a mi Harrison Ford más madurito, después de 19 o 20 años. Gracias por postearlo, querido amigo. Abrazos, MIGUELINA