¡Cerrando ciclos... y siguiendo adelante!

La vida está compuesta de etapas que a su vez contienen ciclos.

Ciclos de vida que se interelacionan con cada estadio,cada momento particular de nuestra mundana existencia.

Nos gestamos,nacemos, nos desarrollamos y morimos. Todo en medio de un carroussel de circunstancias,que se matizan en una paleta multicolor, con diversas tonalidades de acuerdo a los momentos históricos que nos corresponde vivir y apreciar.

En cada interín,se augura una esperanza y se le da vida, a su vez, a múltiples situaciones que se nos presentan, algunas veces con prescindencia de nuestra voluntad o deseo y nos parecen extrañas,ajenas a nuestra propia voluntad, sin deternos a pensar que quizás obedecen a un deseo supremo, a una experiencia exigida por el creador (como quiera que éste se llame y cualquiera sea su naturaleza).

Son las llamadas "pruebas" que hay que atravesar,vivir y superar en el largo y sinuoso camino del vivir, por encima de existir.

A pesar de nuestro voluntarioso rechazo a tales situaciones, al dejarnos llevar y permitir que fluya el orden lógico (o ilógico, a veces)de las cosas, terminamos entendiendo que así debía suceder y que teníamos la valía,el coraje y enteresa necesario para lograr llegar...al otro lado del río.

Si, en lo personal he de admitir que cuesta asimilar estas circunstancias,sobre todo, al finalizar una semana tan atribulada y casi culminarla, con la inicialmente triste noticia, de la culminación de un ciclo de unos queridos amigos, quienes desde hace varios años, se habian dado a la tarea de generar satisfacción y seguro servicio a sus coterráneos con sus mascotas: Paz Elena y Ciro, extraordinarios profesionales, de la veterinaria y el derecho, grandes amigos,excelentes padres y nobles ciudadanos del mundo, quienes han decidido responsablemente finalizar con sus tareas como dueños de La Barca, un lugarcito particular donde nos encontrábamos cada fin de semana con nuestras mascotas paraque cariñosamente nos las peluquearan y transformaran de nuevo, en los radiantes y hermosos compañeros de vida que son,relación que trascendió de lo meramente comercial a lo humano, gracias al don de gente de estos increibles y maravillosos seres, que nos han brindado, además de un excelente servicio,una amistad sincera,plagada de maravillosos y humanos momentos de alegría, jocosidad,solidaridad y afecto.

Sí, se van La Barca, o mejor dicho, la barca deja de estar anclada en nuestra orilla y toma otros rumbos, otros derroteros senderos para brindar a sus extraordinarios capitanes, un sin fin de nuevas y mejores emociones,por estos caminos de Dios.

Por ello me refería al inicio a la culminación de una semana inicialmente triste, pero luego de analizados los hechos y circunstancias naturales aqui relatados, concluyo que no hay cabida para lágrimas, ni tampoco para tristezas, porque nuestros buenos amigos, tan sólo se van del viejo y querido sitio, porque han cerrado un ciclo,mientras otro, maravilloso,creativo y pleno de esa particular luz que particularmente irradian comienza para ellos, quienes se alejan del pequeño rincón que ocupaban,pero jamás de nuestros corazones y afectos donde han de permanecer por siempre...por ello les deseo toda suertede dichas y bienaventuranzas en esta nueva etyapa y les extendiendo de nuevo mis brazos para abrazarles en cualquier momento,donde quiera que se encuentren, ratificandoles con ello,no sólo mi amistad,sino mi admiración y aprecio.

¡Buena suerte, amigos!les regalo esta canción.

(La Vi Parada Ahí)

Ella tenía sólo 17 años,
Y ya sabes a que me refiero,
Y su aspecto no tenía comparación,
Cómo podría bailar con otra,
Cuando la vi parada ahí

Ella me miró y yo podía ver
Que dentro de poco me enamoraría de ella
Ella no bailaría con otro,
Desde que la vi parada ahí

Mi corazón hizo "bum"
cuando crucé la sala
y tuve su mano en la mía.

Bueno, bailamos toda la noche
Y nos abrazamos fuerte
Y en poco tiempo me enamoré de ella
Ya nunca bailaré con otra
Desde que la vi parada ahí