viernes, agosto 17, 2012

Formulando de nuevo interrogantes,...sin respuesta?


Cómo hacer ante la adversidad,cuando ella te arropa y no existe nada más, que tratar de permanecer inmutable a su alrededor,para sobrevivirle y salir airoso, a posteriori, de ella?

Cómo dejar de gritar para no perder la voz ante la mirada indolente y complice actitud, de quienes te rodean?cómo permanecer inalterable,imperturbable al darte cuenta del zamureo y descrédito en tus propias narices y ante la aceptación implícita de quien confias?

Tremendas preguntas, ante las cuales obtener tan solo una respuesta, no resulta nada fácil, por tratarse de situaciones que involucran y determinan tu actuar, ante determinadas circunstancias de vida, que se conflictúan en la certera medida de que ocurran ante un público cualificado, no espectadores anónimos que no merecen atención alguna ni malgastar el tiempo de considerarles; donde cobra fuerza el adagio de que que importa lo que piensen los demás;eso es cierto en la medida de que esos "demás" no tengan nada que ver contigo;porque,cuando quienes interactúan con tu realidad particular, formando parte,no de tu escala jerárquica,sino de tu afecto;ahí es donde de veras se empastela la cosa, porque;cómo obviarlo,hacerte el perndejo?cómo actuar cuando el estiércol empieza a llenar los cerrados espacios en los que te encuentras, rodeándolo todo, bajo el beneplácito,tranquilidad e indiferencia inerte de quienes se encuentran a tu alrededor, apostando al fracaso particular para ellos salir airosos (y lográndolo)?pareciera entonces, que dejándote arropar en ella,hacerte el "muertito"hasta tanto pase la debacle, alguien se percate de cuanto ocurre,se de cuenta de las cosas y con manguera o bomba de achique, limpie todo alrededor y se percate de que aún vives, salvando tu vida, peritiendo además la posibilidad de comentarle cuanto aconteció y recomenzar. Y si en el intento te falta el aire y pereces? Pues pareciera ser ese entonces el riesgo que hay que correr, ante tamaña adversidad,rogando a Dios que ello no ocurra! 

2 comentarios:

emperatriz dijo...

Ojalá hacerse el muerto, callarse inmóvil, mientras pasa la tormenta, supusiera un refugio seguro cuando la mediocridad y la desfachatez ajena nos rodean.

Pero amigo mio, me temo que eso sólo contribuye a enterrarnos en vida, casi por voluntad propia "no no me enterréis, ya me encargo yo, gracias" , es el mensaje que damos al mundo cuando ocultamos la cabeza y el coraje, cuando en verdad quisiéramos ocultar el corazón para protegerlo.

Mi consejo, que ese lodazal no te pase de las rodillas, dale al destino el beneficio de la duda, pero sólo el beneficio, no las riendas.

Un abrazo

FEVC dijo...

Sabias palabras, gracias;un cordial y caluroso afectivo abrazo en la distancia!