Quisiera compartir con todo aquel ser maravilloso de los que,a veces,tienen a bien pasar por aca esta hermosa fabula que me envio mi gran amiga Miguelina, a quien no me canso de agradecer,por ser tan especial.
FEVC
El Helecho y el Bambú
Un día decidí darme por vencido…renuncié a mi trabajo, a mi relación,
a mi espiritualidad… quería renunciar a mi vida. Fui al bosque para tener
una última charla con Dios.
"Dios", le dije, "¿Podrías darme una buena razón para no darme por vencido?"
Su respuesta me sorprendió…"
Mira a tu alrededor", El dijo. "Ves el helecho y el bambú?"
"Sí", respondí.
"Cuando sembré las semillas del helecho y el bambú, las cuidé muy
bien. Les di luz, Les di agua. El helecho rápidamente creció.
Su verde brillante cubría el suelo. Pero nada salió de la semilla de
bambú. Sin embargo no renuncié al bambú.
En el segundo año el helecho creció más brillante y abundante. Y
nuevamente, nada creció de la semilla de bambú. Pero no renuncié al
bambú." Dijo Él.
"En el tercer año, aun nada brotó de la semilla de bambú. Pero no
renuncié." Me dijo.
"En el cuarto año, nuevamente, nada salió de la semilla de bambú.
"No renuncié" dijo.
"Luego en el quinto año un pequeño brote salió de la tierra. En
comparación con el helecho era aparentemente muy pequeño e
insignificante. Pero sólo 6 meses después el bambú creció a más de 100
pies de altura. Se la había pasado cinco años echando raíces.
Aquellas raíces lo hicieron fuerte y le dieron lo que necesitaba para
sobrevivir.
"No le daría a ninguna de mis creaciones un reto que no pudiera
sobrellevar" Él me dijo, "¿Sabías, mi niño, que todo este tiempo que
has estado luchando, realmente has estado echando raíces?"
"No renunciaría al bambú. Nunca renunciaría a ti. No te compares con
otros" Me dijo.
"El bambú tenía un propósito diferente al del helecho,
sin embargo, ambos eran necesarios y hacían del bosque un lugar
hermoso".
"Tu tiempo vendrá" Dios me dijo. "¡Crecerás muy alto!"
"¿Qué tan alto debo crecer?" Pregunté.
"¿Qué tan alto crecerá el bambú?" Me preguntó en respuesta .
"¿Tan alto como pueda?" Indagué.
"Sí". El dijo. "Dame Gloria al crecer tan alto como puedas".
Dejé el bosque exaltado, trayendo esta historia para compartirla con ustedes.
Espero que estas palabras puedan ayudarte a entender que Dios nunca
renunciará a ti.
Nunca te arrepientas de un día en tu vida. Los buenos días te dan
felicidad. Los malos días te dan experiencia. Ambos son esenciales
para la vida. Continúa…
La felicidad te mantiene Dulce,
Los intentos te mantienen Fuerte,
Las penas te mantienen Humano,
Las caídas te mantienen Humilde,
El éxito te mantiene Brillante
Pero solo Dios te mantiene Caminando...
Un día decidí darme por vencido…renuncié a mi trabajo, a mi relación,
a mi espiritualidad… quería renunciar a mi vida. Fui al bosque para tener
una última charla con Dios.
"Dios", le dije, "¿Podrías darme una buena razón para no darme por vencido?"
Su respuesta me sorprendió…"
Mira a tu alrededor", El dijo. "Ves el helecho y el bambú?"
"Sí", respondí.
"Cuando sembré las semillas del helecho y el bambú, las cuidé muy
bien. Les di luz, Les di agua. El helecho rápidamente creció.
Su verde brillante cubría el suelo. Pero nada salió de la semilla de
bambú. Sin embargo no renuncié al bambú.
En el segundo año el helecho creció más brillante y abundante. Y
nuevamente, nada creció de la semilla de bambú. Pero no renuncié al
bambú." Dijo Él.
"En el tercer año, aun nada brotó de la semilla de bambú. Pero no
renuncié." Me dijo.
"En el cuarto año, nuevamente, nada salió de la semilla de bambú.
"No renuncié" dijo.
"Luego en el quinto año un pequeño brote salió de la tierra. En
comparación con el helecho era aparentemente muy pequeño e
insignificante. Pero sólo 6 meses después el bambú creció a más de 100
pies de altura. Se la había pasado cinco años echando raíces.
Aquellas raíces lo hicieron fuerte y le dieron lo que necesitaba para
sobrevivir.
"No le daría a ninguna de mis creaciones un reto que no pudiera
sobrellevar" Él me dijo, "¿Sabías, mi niño, que todo este tiempo que
has estado luchando, realmente has estado echando raíces?"
"No renunciaría al bambú. Nunca renunciaría a ti. No te compares con
otros" Me dijo.
"El bambú tenía un propósito diferente al del helecho,
sin embargo, ambos eran necesarios y hacían del bosque un lugar
hermoso".
"Tu tiempo vendrá" Dios me dijo. "¡Crecerás muy alto!"
"¿Qué tan alto debo crecer?" Pregunté.
"¿Qué tan alto crecerá el bambú?" Me preguntó en respuesta .
"¿Tan alto como pueda?" Indagué.
"Sí". El dijo. "Dame Gloria al crecer tan alto como puedas".
Dejé el bosque exaltado, trayendo esta historia para compartirla con ustedes.
Espero que estas palabras puedan ayudarte a entender que Dios nunca
renunciará a ti.
Nunca te arrepientas de un día en tu vida. Los buenos días te dan
felicidad. Los malos días te dan experiencia. Ambos son esenciales
para la vida. Continúa…
La felicidad te mantiene Dulce,
Los intentos te mantienen Fuerte,
Las penas te mantienen Humano,
Las caídas te mantienen Humilde,
El éxito te mantiene Brillante
Pero solo Dios te mantiene Caminando...
2 comentarios:
Es un verdadero placer disfrutar nuevamente de esta hermosa fábula. Gracias por traerla a este querido rincón.
Su contenido nos deja profundas reflexiones...
La paciencia, como una virtud que se logra solo poniendo en práctica. Hay algo en ella que traspasa mi sentir y es la confianza que Dios tiene puesta en cada una de sus creaciones, incluyéndonos.
Algo más que me hizo detenerme en ella es el hecho de no renunciar jamás a cuanto esperamos, y finalmente nos da una pequeña muestra de que cada uno de nosotros posee un propósito distinto en la vida. Se necesita un poco más de tiempo para crecer espiritualmente, a veces, pero a todos, Dios nos brinda las herramientas necesarias para alcanzar cuanto anhelamos.
Bella, indiscutiblemente.
Te reitero mi agradecimiento pues realmente con este post, me ofreces la oportunidad de detenerme en ella y poder internalizarla. Es un verdadero regalo, así como también puedo apreciar ese bello paisaje ensoñador que alcanza a ilustrar su contenido.
Sigamos creciendo, ambos, así como el helecho y el bambú y deleitarnos en ese maravilloso tesoro que hemos encontrado y con un poco de cariño cada día, agradecer la vida.
Mira siempre a tu alrededor, y mira la belleza que te rodea, deleitate en esa grandeza que solo Dios nos permite...Un abrazo y besos de buenas noches, mi querido amigo. Por favor, cuidate mucho si? Te quiero mucho. Tu amiga de siempre...MIGUELINA
Mi siempre tutor estrella... que espectacular fábula... Miguelina de verdad esta super bonito ese escrito... Sabia que al abrir tu blog Freddy, encontraria algo para alentarme esta semana que pensé comenzaria terrible... Te quiero un mundo...
Ilse...
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